viernes, 2 de julio de 2010

LEGION


La premisa de partida es bastante interesante: todo aquello de ver a los ángeles no como pequeños soplagaitas asexuados sino como soldados, me resultó bastante atractivo. Por no hablar del mosqueo de Dios que es algo ya para quitarse el chapó. Incluso todo aquello de situar la Natividad en una zona de descanso polvorienta y dejada de la mano de Dios, (ahora más que nunca), no deja de tener su punto. Pero el caso es que la peli se queda ahí y no avanza hacia ningún sitio. Todo se queda en un pelear contra unos bichos poseídos que pretenden darse un festín a costa de sus almas… y la verdad, yo “Abierto hasta el amanecer” ya la había visto.
Esta película no tiene absolutamente nada por lo que valga la pena sacarse un billete del bolsillo. Lo mejor, la hamburguesa que me fagocité mientras veía los trailers.